Bodegas Alfredo Santamaría: "Culto a la Tierra y al Vino Castellano"

Siguiendo con nuestra ruta enoturística en el Blogtrip #SaboreaValladolid nos acercamos hasta Cubillas de Santa Marta para descubrir las Bodegas Alfredo Santamaría, unas bodegas donde, como bien nos comentan, se rinde culto a la tierra y al vino castellano. Para llegar hasta aquí deberás dirigirte hacia Burgos por la A-62 y estar atentos a la salida 102 que es la que deberás tomar en un trayecto total que no te empleará más de media hora. ¿Te vienes conmigo? 

Abrimos boca con este vídeo.

Si en nuestras anteriores visitas tuvimos la oportunidad de visitar bodegas muy avanzadas en cuanto a instalaciones y tecnología era el turno de conocer el lado más tradicional del enoturismo en tierras vallisoletanas. A pesar de ello nos esperaba alguna que otra sorpresa durante la ruta por las Bodegas Alfredo Santamaría

Nos encontramos en tierras bajo la Denominación de Origen Cigales. 15 Hectáreas de viñedos propios para producir mayoritariamente Tintas del País o Tempranillos junto a otras variedades como Merlot, Albillo o Verdejo. El resultado son excelentes crianzas y reservas que, por voluntad propia, son de producción limitada.Para mostrarnos todo lo que os estoy contando nos acompaña Pablo Santamaría, la 3ª generación que se dedica al arte de la elaboración del vino en estas bodegas. Con él hacemos un recorrido por todas sus instalaciones y nos enseña todos sus secretos.

En primer lugar nos enseña la bodega de nueva construcción, una sala levantada con materiales nobles a base de ladrillo, piedra, adobe y madera donde alberga los depósitos de acero inoxidable con control de temperatura. 

Tras una primera toma de contacto es el turno de conocer las bodegas tradicionales que, desde hace muchos años, han servido en el proceso para la elaboración del vino. En Cubillas de Santa Marta todavía se siguen utilizando y muchos vinicultores las han adaptado a las exigentes normativas actuales para mantener viva la tradición.

Se trata de las bodegas subterráneas, estructuras de hormigón revestidas con resina de uso alimentario. Algo muy particular que estábamos a punto de descubrir y que sin duda llamó la atención de todos los que tuvimos la oportunidad de visitarlas.

Antiguamente no existían los métodos que hay en la actualidad para prensar la uva por lo que había que introducirse dentro de estas estructuras realizando la ardua labor de pisar el grano hasta conseguir el producto deseado. Imaginaros lo que era entrar en estos espacios por su parte superior y pasar allí horas y horas. Sin duda es una labor muy de agradecer por los amantes del vino que han puesto en su mesa alguna vez una botella de vino de estas bodegas. Yo al menos lo veo así y gracias a visitas como esta he aprendido a ver la la historia que hay detrás de cada botella de vino que abro. Así lo veo y así os lo intento transmitir.

Entre las peculiaridades que nos encontramos dentro de estas bodegas es el evidente ahorro en el consumo de energía ya que la temperatura ambiente de las mismas es ideal al encontrarse a 8-14 º durante todo el año. No es de extrañar que utilizando métodos tradicionales unidos a las condiciones naturales de las bodegas solo puedan salir vinos de excelente calidad.

La siguiente sala que nos enseñó Pablo dentro de la bodega subterránea fue la nave de crianza. En este espacio reposa el vino en  las 51 barricas de roble americano y francés que contiene antes de su embotellado final en el que empleará alrededor de 25.000 botellas.

Antes de proceder a la cata de algunos de los mejores vinos de las Bodegas Alfredo Santamaría descubrimos otro espacio situado junto a las mismas y que seguro que os interesa. 

A parte de todo el área vinícola que os he mostrado nos encontramos conque también disponen de alojamiento rural para que puedas disfrutar sin prisa de tu visita y sin riesgo ni preocupación de tener que coger el coche después de haber consumido alcohol.  

Se trata de las casas rurales y centro de enoturismo "Pago de Trascasas". Numerosas salas de ocio para lectura, billar o sala de tv, chimenea, restaurante, etc. Lo mejor son sus encantadoras habitaciones que invitan al descanso y donde seguro que podrás disfrutar del relax después de haber realizado una visita por los alrededores.

Y por fin entramos en faena. Llego la hora de disfrutar de esos vinos que permiten que todo lo que os he mostrado exista. Para ello entramos en una acogedora sala perfectamente acondicionada dentro del centro de enoturismo que me pareció ideal para cualquier tipo de reunión familiar o con amigos. 

Pablo nos cuenta que el 85 % de los viñedos se destinan a Tintas del País o Tempranillos y el 15 % restante se destina al Merlot procedente de la región de Burdeos (Francia) y Verdejos y Albillos para blancos y tmbién para la elaboración y vinificación de rosados. En la última fotografía os muestro los vinos que tuvimos la oportunidad de probar y que son:- Blanco y Rosado "Valvinoso".- Tinto Reserva "Trascasas".A falta de probar sus Tintos Crianzas "Alfredo Santamaría" y su apreciado Rosado "Pago el Cordonero" conocido por todos como "Clarete" quedamos más que satisfechos afirmando con esta cata que la visita  previa cobraba sentido. 

Las nuevas tecnologías nos facilitan muchas veces nuestras labores del día a día, también nos ayudan a comprender ciertos aspectos de la vida de una manera más sencilla pero también es un placer descubrir que la calidad no está reñida con lo artesanal, con las costumbres y con el "ritmo lento de las cosas". A veces tengo la sensación de que el mundo va más rápido de lo que soy capaz de asimilar pero puedo decir que, gracias a pequeños pueblos y bodegas como esta y a la forma de hacer las cosas de Pablo Santamaría... es algo que esta vez no me ha ocurrido. Un saludo viajeros!!