Cocodrilo Siamés: "Un futuro incierto"

Uno de los aspectos que más me llama la atención en mis viajes, además de conocer la cultura, historia, grastronomía, etc., es descubrir la fauna local de aquellos lugares que visito siempre que puedo. Desde muy pequeño he sido un gran fan de aquellos animales que provocan fobia en muchas personas como arañas, serpientes, tiburones o, como en este caso, cododrilos. Nos vamos hasta el Sudeste Asiático, concretamente hasta Tailandia para intentar contactar con el cocodrilo siamés y descubrimos que este reptil, lamentablemente, tiene un futuro incierto.

Nos vamos hasta la provincia de Nakhon Pathom cercana a Bangkok, hasta el Samphran Elephant Ground & Zoo. Como podéis imaginar entramos en un espacio que cuenta con numerosas especies animales y vegetales pero nuestra intención en esta ocasión es descubrir la granja de cocodrilos que se encuentra en su interior. A finales de los años 80 se creyó totalmente extinguido de sus habitat naturales pero afortunadamente no fue así. Desde que se descubrió que todavía quedaban algunos ejemplares en libertad se incluyo en la lista CITES, animales en peligro de extinción con calificación de alto riesgo.

Las causas por las que este animal casi desaparece de la faz de la tierra están, como no, relacionadas con el hombre. La deforestación, creación de centrales hidroeléctricas o la caza furtiva son algunos de los factores que han llevado al cocodrilo siamés al borde de la desaparición.

Nuestra visita a esta granja no dejó de sorprendernos al ver que en ella había cientos de ejemplares en enormes lagunas construidas y ambientadas exclusivamente para ellos. Separados por edades nos encontramos con varias parcelas y por un momento pensé que habíamos salvado una especie. Parece que es así pero lo que de verdad está costando es que se reproduzcan en libertad. 

Este cocodrilo se extendía por todo el sudeste de Asia y pocos son los lugares donde, en la actualidad, se está consiguiendo que prosperen. Entre los países donde se han descubierto, tras soltar algunos ejemplares, que han conseguido criar en libertad se encuentra Vietnam. Camboya también ha hecho progresos en este sentido pero de nuevo la mano del hombre pone en peligro dichos progresos ya que han tenido la brillante idea de presentar un proyecto para una central hidroeléctrica justo en la reserva natural donde se han puesto en libertad.

El cocodrilo siamés cuenta con unos rasgos característicos que lo hacen único. A diferencia de otras especies de cocodrilos cuenta con una coloración en tonos verde oliva y verde oscuro que se aprecian sobre todo en la zona de la cola. Pueden medir 3 metros de longitud, pesar unos 150 kg y poner entre 20 a 50 huevos.

A diferencia de otros cocodrilos el "siamés" es bastante dócil, se alimenta de anfibios, peces, pequeños mamíferos y otros reptiles. Algo que me sorprende mucho es que hemos estado a punto de exterminarlo sin conocer muchos aspectos de su vida en su hábitat natural. Esto nos da una idea sobre las pocas veces que este cocodrilo a resultado una amenaza para el hombre pero ya sabemos que la moda ha mandado durante mucho tiempo y los bolsos de cocodrilo, entre otros complementos, han sido muy demandados.

En el Sudeste Asiático hay infinidad de granjas de cocodrilos. Bajo mi punto de vista han sido una herramienta muy útil para conseguir que la especie no se haya extinguido pero tampoco vamos a negar que también sirven a intereses comerciales de muchos países interesados. De hecho de estas granjas se exporta a todo el mundo la carne de este animal para su consumo, en consecuencia también sus pieles pero al menos ahora se hace de una forma, digamos por llamarlo de alguna manera, "equilibrada". Con esto me refiero a que al menos hay un control para que el cocodrilo siamés no vuelva a estar al borde de la extinción.

En muchas de estas granjas también se aprovechan a estos cocodrilos para hacer espectáculos, de esos que te ponen los pelos de punta, no es para menos pues ya hemos visto en alguna ocasión como las fauces de estos animales se cerraban con la mano del domador dentro de su boca y es que ya lo dicen... "quién juega con fuego". También sea dicho que hay que estar muy acostumbrado a tratar con ellos desde muy pequeños y ser muy valiente para meter incluso la cabeza entre los dientes de este reptil.

En este vídeo os muestro parte de las instalaciones donde se cría al cocodrilo siamés y también parte de un espectáculo donde a una le cuesta mantener el ritmo cardíaco en niveles óptimos. No te lo pierdas, no tiene desperdicio.

Tras el "Crocodile Show" seguimos recorriendo durante un rato las instalaciones y descubrimos espacios donde a uno no le gustaría darse un baño, escenarios de aguas sombrías repletos de vegetación donde uno no puede distinguir ni siquiera la silueta de estos grandes depredadores.

Ver a decenas de ejemplares fuera del agua fue algo esperanzador, queda mucho por hacer y sobre todo falta mucha voluntad para que estos animales puedan volver a su hábitat natural. El ser humano arrasa con todo y ocultando intereses puramente comerciales levantando presas y centrales intentando convencer de que es por el interés de las poblaciones de la zona. 

Ya sabemos que este tipo de obras benefician enormemente a las empresas que las ponen en funcionamiento y a los políticos de turno que, bajo manga, aceptan acuerdos a cambio de cuantiosos beneficios económicos. No me creo a estas alturas, con los adelantos tecnológicos y los estudios que se llevan a cabo que no se encuentren soluciones para seguir avanzando sin destruir todo el entorno natural que nos rodea. Esperemos que algún día haya un futuro para el cocodrilo siamés y que este futuro deje de ser incierto. Un saludo viajeros!!