Katmandu, la ciudad entre la tierra y el cielo nos brinda la oportunidad de conocer uno de los santuarios más importantes en la región de Asia Meridional. Infinidad de devotos del budismo e hinduismo se acercan cada año hasta Boudhanath Temple. En la actualidad son muchos los que llegan hasta la ciudad en tren o avión pero algunos aún lo hacen como antiguamente, siguiendo la ruta del Tibet.
Os hemos preparado un vídeo de 3 minutos que no os debéis perder. En él os mostramos su estupa, una de las mayores del mundo y aunque a su alrededor se ha montado todo un imperio para hacer negocio con el turista, es indudable la magia que desprende este lugar. En especial un pequeño santuario tibetano que también os mostramos al final del vídeo.
Llegar a Boudhanath Temple no tiene ninguna complicación. Desde el popular barrio de Thamel no tenemos más que coger un taxi que nos cobrará alrededor de 300 rupias (2€ aprox.). El tiempo empleado será de entre 13 y 15 minutos, aunque en una ciudad como Katmandú esto es un tanto imprevisible. De cualquier forma nosotros hemos querido dejaros un mapa para hacer la ruta a pie ya que la anterior opción no lo requiere. Si estáis dispuestos a caminar debéis saber que emplearéis alrededor de 1 h 20 min para recorrer unos 6,5 kilómetros.
Para acceder al santuario hay que pagar una entrada que cuesta unas 150 rupias (1 € aprox.) Con ella podrás acceder a una gran plaza circular de alrededor 100 metros de diámetro en cuyo centro se encuentra la estupa blanca de Boudhanath.
Es un lugar muy transitado ya que, además de turistas, por aquí pasa a diario gente local como peregrinos, estudiantes después del colegio, monjes de templos cercanos, etc. Nos da la impresión de ser un punto de encuentro y de reunión para sus habitantes además de un lugar sagrado para la oración.
La construcción cuenta con una plataforma blanca de tres niveles conocida como mandala y la torre de la estupa donde se encuentran los ojos de buda que miran hacia los 4 puntos cardinales. En total se eleva 36 metros sobre el suelo. Sus grandes dimensiones la convierten en una de las estupas más grandes del mundo.
Antes de adentrarnos en los aspectos culturales y religiosos que envuelven a Boudhanath rodeamos la plaza para entrar en situación. Como comentábamos antes es un lugar muy transitado, la plaza alberga
establecimientos donde la gente local compra a diario. Encontramos especias, arroz y otros alimentos típicos de la gastronomía de Nepal.
Conforme íbamos caminando descubrimos que hay mucho más alrededor del santuario. Descubrimos establecimientos repletos de souvenirs para turistas y otros objetos enfocados al visitante. Mirando el conjunto global de la plaza, por un momento nos pareció estar en un "parque temático" en lugar de en un lugar sagrado. Normalizamos la situación hasta comprender que gran parte de la población vive gracias al turismo cultural, además del turismo de montaña. En cierto modo es normal que se monten negocios alrededor de los lugares más turísticos aunque en determinadas circunstancias, al encontrarnos en un lugar circular cerrado al intenso tráfico de Katmandu, la sensación es cuanto menos extraña o poco común respecto a Europa, incluso a otros lugares sagrados que encontramos en Asia.
Es el turno de centrarnos en el objetivo principal de esta visita. Ponemos nuestras miradas en la gran estupa y en la gente que se mueve alrededor de ella. Y es así, dicen que
en Boudhanath las oraciones se entonan al tiempo que se le da tres vueltas a la estupa. No tardamos mucho tiempo en comprobar como algunas personas lo hacía al tiempo que hacían girar las ruedas de oración situadas en el la parte inferior del mandala.
El fuego siempre está presente en toda ceremonia religiosa que se celebra en Nepal, símbolo de purificación y herramienta imprescindible para la gran mayoría de budistas e hinduistas a la hora de realizar sus ofrendas. Boudhanath es el templo tibetano más importante del mundo fuera del Tibet.
Como toda buena historia que se precie el templo ofrece diferentes versiones en cuanto a su construcción. Las fechas son tan diversas que van desde el siglo V hasta el siglo VIII según diferentes culturas. De la misma forma también son diferentes las versiones en cuanto a las razones de su construcción. En cualquier caso muchos exiliados siguieron la ruta del Tibet a través de las montañas hasta Katmandú encontrando en Boudhanath su lugar sagrado de oración. Hoy día es visitado por peregrinos de China, Tibet, Bangladesh, incluso del lejano Japón.
Tal es su relevancia que dentro de la plaza encontramos un
pequeño gompa de origen tibetano. Este pequeño santuario en honor a
Maitreya (sucesor de Siddhartha Gautama) sirve de aprendizaje y formación para los monjes iniciados en la vida monástica. Nada más entrar al lugar sagrado vemos la enorme figura de Bodisattva Maitreya. Realmente impresiona por su tamaño y por la fuerza visual que desprende. Os dejamos algunas fotos de este gompa, sólo tenéis que pinchar sobre ellas para verlas ampliadas.
Boudhanath recibió la calificación de Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1979. La revolución de Mao obligo a muchos monjes tibetanos a escapar de China y Tibet y los que atravesaron las montañas en busca de refugio fueron acogidos en Nepal. Si viajáis hasta aquí los identificaréis fácilmente por su túnica roja carmesí. Podríamos decir que este templo es para el budismo tibetano como la Meca para el Islam.
Boudhanath Temple es un imprescindible para todo aquel que se acerque a Katmandu y quiera conocer parte de la historia y la cultura de la región. Nepal y Tibet están separados por el Himalaya, una majestuosa cordillera venerada por los habitantes de ambos países y una vía de escape durante muchos años ante la intolerancia y la ambición del gobierno chino. Puede que algún día las cosas cambien y por fin muchas personas exiliadas puedan regresar a su hogar siguiendo la ruta del Tibet. ¡Un saludo viajeros!
Bravo Miguel..!! Me ha encantado tu vídeo de Boudhanath Temple y tu entrevista de la radio. Enhorabuena jefazo!!
ResponderEliminarGracias tocayo, me alegro que te haya gustado.
EliminarUn abrazo!!
Gracias peter,
ResponderEliminarMe alegra saber que te ha gustado pero aunque menciono el Tibet el artículo es de un templo en Nepal.
Un saludo.