Coffee Bay: Explorando los secretos de la costa salvaje

Nos vamos a Coffee Bay, en plena costa salvaje sudafricana. Sin lugar a dudas se trata de un lugar diferente entre todos los que hemos visitado a lo largo de los más de 2500 kilómetros que hemos recorrido, bordeando el Océano Atlántico y el Océano Indico. Adentrarnos en el que fuera hogar del combativo pueblo Xhosa, es encontrarnos con uno de los secretos mejor guardados de la costa sudafricana y nos muestra una realidad diferente a la que hemos encontrado en otros destinos más turísticos. Con una gran belleza paisajística, Coffee Bay es un destino imprescindible si quieres salirte de lo convencional y comprobar cómo es la vida en los entornos rurales de Sudáfrica.

DÓNDE SE ENCUENTRA COFFEE BAY EN LA COSTA SALVAJE

Llegar a Coffee Bay es sin duda toda una aventura. Debes esperar cruzar tramos de tierra muy bacheados y carreteras asfaltadas estrechas, agrietadas y con mucho tráfico de personas a pie y animales de todo tipo. La mejor opción es tomártelo con paciencia. Es más, nosotros tuvimos que dar la vuelta casi a punto de llegar a Coffe Bay. Nos metimos en un sendero de tierra con profundos surcos, tramos revirados y en pendiente. No nos quedó otra opción que deshacer el camino y buscar otra alternativa. Lamentamos no poder indicarte el mejor trayecto al tratarse de una zona rural y salvaje, donde las indicaciones brillan por su ausencia.


Cusiosamente, nos resultó más fácil salir de Coffe Bay y encontrar la N-2 en dirección a Durban, que llegar al destino desde Port Alfred. Será necesario guiarse por alguna aplicación vía satélite como Maps.me y por supuesto, preguntar a los aldeanos para evitar meterte en problemas. Al final, es cuestión de tiempo pero llegar se llega.

COFFE BAY: VIVIENDO LA SUDÁFRICA MÁS RURAL Y SALVAJE

No me malinterpretes cuando menciono la palabra salvaje. Este termino no lo utilizo para designar a su población en absoluto. En este sentido, quiero referirme a su entorno y unos extraordinarios paisajes que tan solo contrastan con las casas tradicionales conocidas como "rondavels". No esperes encontrar complejos turísticos o edificaciones modernas. Cuando utilizamos el termino rural para referirnos a Coffee Bay, es absolutamente real y en la máxima extensión de la palabra.

DESCUBRE MÁS RUTAS EN LA COSTA ORIENTAL DE SUDÁFRICA

Al termino del tortuoso camino que acabábamos de realizar, la primera impresión al avistar Coffee Bay fue más que satisfactoria. Observamos como el Río Nenga nos conduce hacia una verde colina de cara al mar y en sus alrededores, unas pocas construcciones básicas que se reparten sin ningún orden a lo largo de la carretera. Como no podía ser de otra manera, lo primero que hicimos fue dirigirnos hacia nuestro alojamiento. Aquí todo es una lotería y en este caso, nuestra elección nos llevó a lo alto de otra colina. Tuvimos serias dificultades para subir el coche hasta arriba, pero al final la prueba fue superada.

Al final, nuestro alojamiento resulto ser un rondavel tradicional, de los muchos repartidos por las numerosas colinas de Coffee Bay. Dispones de unas 15 opciones de alojamiento, que oscilan entre los 19 € y los 110€. Todo depende de tus necesidades, aunque si buscas comodidades deberá decantarte por las opciones más caras. No todos disponen de wifi, aunque no tiene demasiada importancia si vas a pasar una noche e incluso puede que merezca la pena desconectar.

No nos quedó mucho más tiempo, debido a la larga ruta del día y su lento desarrollo ante las dificultades que nos encontramos en la carretera. Aun así, no nos arrepentimos de haber decidido recorrer toda la costa sudafricana en coche. Esto nos ha permitido disfrutar a nuestro ritmo y prueba de ello son los impresionantes paisajes que a continuación te vamos a mostrar.

DESCUBRIENDO HOLE IN THE WALL EN COFFEE BAY

A la mañana siguiente, nos levantamos muy temprano. Teníamos por delante una ruta corta de unos 16 kilómetros, pero con numerosas paradas para descubrir las inmejorables vistas que nos iba a ofrecer Coffee Bay. El recorrido transcurre en ocasiones próximo a la costa, aunque también hay tramos de interior donde sorteamos algunas colinas. Afortunadamente, estos tramos de carretera eran medianamente decentes y pudimos recorrer la zona con cierta facilidad. Nos dirigimos hacia Hole In The Wall, literalmente un agujero a modo de tunel en un enorme saliente rocoso situado en la costa. Por el camino te mostramos los famosos rondavels y hacemos una pequeña parada a mitad de camino, para contemplar las vistas y el hermano pequeño que se conoce como Baby Hole In The Wall.

Continuamos nuestro camino tras esta breve parada y llegamos hasta la playa donde se encuentra Hole In The Wall, que también recibe el nombre del popular monumento natural. Es en este lugar donde vimos algún que otro chalet en lo alto de los acantilados. La única prueba de que algún que otro extranjero ha decidido establecerse en este remoto lugar de Sudáfrica. Con el pasado colonial con el que cuenta Sudáfrica, no es raro encontrar cabelleras rubias de holandeses e ingleses.

Tras ascender algunas dunas nos adentramos en una zona arbolada. Llegamos a un claro donde divisamos la arena y nos quedamos maravillados al contemplar la magnífica escultura natural que emergía del agua para presentarse ante nosotros. Estamos delante de Hole In The Wall, un auténtico capricho de la naturaleza que nos hace poner los pies en la tierra. De esas cosas que te recuerdan lo pequeños, débiles e insignificantes que somos dentro de nuestro planeta.

No veníamos preparados para darnos un baño en este impresionante lugar. Una mala decisión ante tal espectáculo y ante la claridad de las aguas que sin duda nos invitaban a entrar. Tras esta última y espectacular parada, regresamos a Coffee Bay para contemplar su maravillosa playa. Será nuestra última panorámica, antes de continuar nuestro camino hacia el este en dirección a Port Shepstone.

Como puedes comprobar. este rincón perdido llamado Coffee Bay te ofrece fantásticos paisajes. Hasta aquí se aventuran únicamente algunos viajeros, mochileros y surferos que buscan lugares poco explotados por el turismo. Nos alegramos de haber tomado la decisión de llegar hasta este lugar recóndito de la Costa Salvaje, hogar del pueblo Shoxa y de ese gran eminencia que fue Nelson Mandela. Si eres intrépido, no te importa apartarte de los caminos trillados y buscas aquello en lo que la mayoría no se fija cuando abren un mapa, no lo dudes... atrévete a visitar Coffee Bay. ¡Un saludo  viajeros!